Acarreos y compra de votos en San Baltazar Campeche, así buscan García y Colín ganar la presidencia auxiliar

El grupo a favor de Juan Manuel Colín, quien busca reelegirse, ofrecía 350 pesos por voto; su adversario, 400 pesos.
Daniela Hernández

Como si no se tratara de un delito electoral, un grupo de personas se apoderó de la casilla de San Baltazar Campeche para organizar, sin el temor de ser descubiertos, el acarreo de más de mil personas y la compra de votos masiva a favor de Roberto García y Juan Manuel Colín, ambos candidatos a la presidencia auxiliar.
La junta auxiliar, que celebra su plebiscito este domingo, atestiguó la apropiación de sus calles por la llegada de acarreados. Por un lado, una fila de camiones invadió la avenida Eduardo Cue Merlo, de los que descendían grupos de al menos 30 personas, dirigidos por hombres con gorras fosforescentes, quienes portaban listas impresas en las manos. Una vez bajaban de las unidades, acompañaban al grupo a su fila y hasta el ingreso a la sede para votar, como si fueran guías de turismo.

En las calles aledañas, otros grupos bajaban de otras unidades para dirigirse al mismo sitio, pero encabezados por otras personas del grupo opositor. Estos, en cambio, se distinguieron por usar gorras de un color diferente.
La casilla, a diferencia de otras ubicadas en juntas auxiliares cercanas, lucía saturada de personas, quienes, según describieron, debían esperar en fila al menos una hora. El sacrificio, para la mayoría, fue recompensado con 350 o 400 pesos, según el candidato, reveló una de las mujeres que esperaba afuera de la casilla, ubicada en la escuela nocturna 6 de Enero de 1915.

Los rojos (de gorra) son de Roberto García y da 400 votos, pero tienen que sacarle fotos, y el Colín 350 pesos, varios se van con Roberto porque paga más y porque a este (Colín) ya lo queremos sacar

expresó la mujer

La compra de votos fue normalizada en la junta auxiliar, las propias vendedoras ambulantes que se encontraban en la calle sugerían buscar a uno de los dos bandos para vender el voto antes de ingresar a la casilla. El delito electoral alentó a miles de personas a ir a votar, quienes saturaron la sede.
Ya queremos sacar a Colín
“Luego luego se ve a las que andan formando las filas, búsquenlos para que les pague”, insistió la misma mujer al salir de la casilla, sin percatarse de que hablaba con una reportera. “Ya queremos sacar a Colín”, agregó, haciendo referencia a que Roberto García pagaba 50 pesos más para lograr más votos a su favor.
Al interior de la escuela, otras mujeres esperaban por pasar a votar, preparadas con el teléfono en la mano para tomarle una foto a su boleta marcada. “¿Con qué candidato viene?”, cuestiona este diario a una señora de la tercera edad que descendió de uno de los camiones, acompañada de su hija. “Que le contesten afuera, allá está el organizador”, fue su respuesta.

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